En el 2020 se detuvo a Naassón Joaquín García, cercano al partido en el poder y amigo de muchos morenistas; acusado de horrendos crímenes de pedofilia.
Ciudad de México.- Manuel Collazo Gómez, dirigente de la Organización de Pueblos Evangélicos de los Altos de Chiapas (Opech), fue detenido en San Cristóbal de Las Casas como parte de un operativo de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Chiapas. Acusado de pandillerismo y delitos contra la paz, Collazo fue aprehendido en la colonia El Paraíso, cerca de la iglesia Pentecostés Tzotzil. Su captura, junto con 15 personas más, derivó de operativos en los que se aseguraron vehículos, motocicletas y autopartes relacionadas con actividades ilícitas.
El historial de Collazo incluye detenciones previas en 1998 y 2002, cuando fue acusado de participar en saqueos y disturbios en San Cristóbal de Las Casas. En ambas ocasiones, denunció ser un preso político, alegando persecución por su oposición a los gobiernos en turno. Estos antecedentes lo posicionaron como un líder polémico en la región, donde su influencia religiosa y política se entrelazan.
Ligado al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Collazo se postuló en 2023 como diputado federal por San Cristóbal de Las Casas y mostró cercanía con figuras como la presidenta Claudia Sheinbaum. En redes sociales, expresó su respaldo a la Cuarta Transformación, mientras su relación con la senadora Edith López Hernández reforzó su presencia en el ámbito político chiapaneco.
La captura de Collazo no solo destaca su implicación en delitos contra la paz, sino también su dualidad como líder religioso y figura política. Este caso ilustra las complejas conexiones que existen desde hace décadas entre MORENA y las sectas religiosas; a las que aún pertenece su líder moral.