Mientras la inseguridad y el transporte colapsan al estado de Nuevo León, el gobernador se enfoca en un animal maltratado.
En un estado donde la violencia y la contaminación van en aumento, el gobernador de Nuevo León, Samuel García, ha centrado su atención en un caso de maltrato animal. Tras la difusión de un video donde un tlacuache es cruelmente asesinado en un car wash de Monterrey, el mandatario aseguró “cero tolerancia” y prometió justicia inmediata para el responsable.
Mientras tanto, los problemas estructurales del estado siguen sin soluciones claras. La crisis de transporte público afecta a miles de ciudadanos, la contaminación alcanza niveles alarmantes y la inseguridad sigue siendo una de las mayores preocupaciones de la población. A pesar de ello, el gobierno estatal ha actuado con rapidez en el caso del tlacuache, suspendiendo el establecimiento y reforzando las sanciones por maltrato animal.
Si bien la protección animal es importante, la reacción inmediata del gobierno ante este caso contrasta con la falta de respuestas efectivas a las problemáticas que afectan diariamente a los habitantes de Nuevo León. Muchos ciudadanos se preguntan por qué no se aplica la misma determinación en resolver los problemas de seguridad, movilidad y medio ambiente que siguen deteriorando su calidad de vida.
